Son una especie aparte. Últimamente estoy empezando a pensar que nisiquiera son humanos, son un género distinto, una aberración de la naturaleza. Son ese tipo de humanoides que cuando llegan a un lugar y no hay plazas disponibles, esperan, esperan, y esperan intentando hacerles sentir culpables a las personas que están disfrutando de su posición.
Sobre todo me refiero a los observadores bien conocidos por los alumnos de la UNAV que meten horas en el C.T.I. Estos seres llegan a la sala de ordenadores, y la encuentran llena. ¿Que haría cualquier persona con dos dedos de frente? Se daría la vuelta, y se piraría a hacer cosas de más provecho. Pero un observador JAMÁS haría eso, no, amigos. Un observador (me refiero a él/ella como un ente individual, pero pueden ir en grupo) se queda ahí, de pie, mirando fijamente a la gente que está sentada en su ordenador. Deduzco que el "modus operandi" de estos entes es el hacerte sentir culpable a fuerza de mirar tu cogote, como si fuera maravillos. Parece que digan "ey, tú, que estás mirando páginas de dollfies, NECESITO usar ese ordenador para mandarle un e-mail a mi amiga maripuri". Craso error, observadores, creo que jamás nadie se sentira culpable y la conciencia le remorderá hasta que tenga que abandonar su PC.
Desde aquí recomiendo fervientemente a estas..."personas" que cuando lleguen a la sala de ordenadores y este llena POR FAVOR la abandonen, ya que no solo joden, si no que me PERTURBAN y no me dejan navegar en paz. Hago un llamamiento a estos seres, para que entren en razón, y se percaten que a muy pocos metros tienen otra sala que pueden utilizar, en el edificio de Derecho, y que se jodan como muchas veces he hecho yo y me dejen mirar páginas de Dollfies agusto. He dicho.
La cola que hay que hacer para entrar al CTI de Comunicación.